Bailando en la oscuridad, una película musical de no creerse

Trama:
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La película se desarrolla en Estados Unidos en el año 1964. Selma (Björk) es una inmigrante checa que se muda a aquel país con su hijo Gene. Su pasión es el tetro musical, por lo que diario asiste a los ensayos de la obra comunitaria; sin embargo, padece una enfermedad hereditaria degenerativa que le está ocasionando una rápida ceguera progresiva. Por este motivo, Selma ahorra centavo a centavo en una lata que guarda en su cocina para pagar una operación que evite que su hijo sufra el mismo destino. Pero una serie de problemas podrían complicar su propósito.

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Crítica:

Jamás una película había hecho estremecer mi ser interior con tal potencia. Pero lo más sorprendente es que sea musical. Y es que este tipo de films siempre rayan en la farsa y casi siempre en la comedia fácil; cuando intentar ser dramáticas, se quedan en melodrama telenovelero (salvo honrosas excepciones como Moulin Rouge).

Por su parte, Bailando en la Oscuridad sí logra transmitir eficazmente una multitud de estados de ánimo y de reflexiones sobre la sociedad y la impartición de justicia actuales. Innovadora y excentrica, logra mantener la credibilidad del argumento en todo momento, con una edición, música y dirección magistrales, aparte de un perfecto y aleccionador desarrollo del guión y la actuación sin pecado de la protagonista y también cantante Björk.

Una madre soltera a punto de quedarse completamente ciega, hace todo lo que dicta el más puro y verdadero amor de un padre hacia su hijo, aun a costa de su propia existencia. El tema que observamos es la injusticia. El asunto narrativo es arreglar todos los asuntos personales mientras podamos; en tanto, el asunto argumental estriba en elegir entre el bienestar propio o el ajeno.

El mensaje estriba en que el derecho como maquinaria social y los valores morales, pocas veces coinciden para decidir correctamente el destino de una persona -tanto dentro como fuera del tribunal-.

Una película impactante que no deben perderse.

Países: Dinamarca, Alemania

Año: 2000

Género cinematográfico: Musical, drama.
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Valoración numérica: 9.78·

• Disfrute: 10·
• Actuaciones estelares: 10·
• Actuación de conjunto: 9·
• Dirección: 9.5·
• Argumento: 9.5·
• Originalidad del guión: 10·
• Diálogos: 9·
• Técnica: 2 décimas extras (música y edición)

Datos históricos:

Dancer in the Dark es una película de 2000 dirigida por Lars von Trier. Este drama musical cuenta con las actuaciones de la cantante islandesa Björk, Catherine Deneuve, David Morse, Peter Stormare, Joel Grey.
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Es la tercera de la trilogía fílmica Corazón dorado de von Trier en la que se incluyen Breaking the Waves con Emily Watson, y Los idiotas; todas historias de heroínas que se mantienen inocentes pese a sus acciones. La banda sonora de la película, luego editada en el álbum Selmasongs, fue creada en su totalidad por Björk.
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Se trata de una coproducción en la que participaron Dinamarca, Alemania, Países Bajos, Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Suecia, Finlandia, Islandia y Noruega.
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Trailer

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Mayores detalles de la historia (spoiler):
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Selma participa en la obra teatral The Sound of Music donde comienza a quedarse ciega. Cuando su vida es aburrida y miserable, comienza a tener alucinaciones donde ve a la gente en números teatrales.

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La vida de Selma comienza a ser una auténtica ruina; uno de sus supuestos amigos la traiciona, le ocurren cosas malas en parte por culpa de sus alucinaciones y otra por su enfermedad irreparable.