Puedes ir por la vida creyendo que nada cambiará, por lo menos en un largo tiempo; pero el cambio no tiene palabra de honor y de un momento a otro te tiene preparada una sorpresa, no siempre buena.
Colin Firth encarna a George, profesor universitario que pierde el sentido de su vida, tras la trágica muerte de su verdadero amor. Sumado a ese dolor, también tiene que sortear los duros prejuicios de una sociedad americana de los años sesenta que no lo aceptaría si declarara abiertamente su condición homosexual.
El tema del film es la tristeza, derivada de la muerte de un ser querido. El asunto consiste en encontrar la manera de seguir adelante con nuestra vida, sobreponiéndonos a la desilusión que emana de saber que ahora carecemos de algo fundamental que antes sí teníamos. El mensaje estriba en que nunca debemos darnos por vencidos aunque nos hallemos en una situación difícil de superar, porque en la vida siempre está presente la esperanza de encontrar lo que nos falta, o incluso algo mejor.
Con una impecable actuación de Colin Firth (George), esta pelicula nos muestra todas las caras del dolor que sufre un hombre viudo, quien además ya no tiene la motivación ni la energía para ocultarse para no sufrir de discriminación como homosexual; tampoco vislumbra algo que pudiese darle sentido a su vida.
Por su parte, la actuación de Julianne Moore (Charley) es muy buena, pero su personaje como la mejor amiga y examante del protagonista es desaprovechado; mientras que el personaje de Kenny (interpretado por Nicholas Hoult) es convincente y sirve para dar buenos giros argumentales a una trama que es interesante y nos provoca la reflexion, pero que no es totalmente explotada por el guión, ya que éste sólo nos muestra lo fundamental de la situación de George, sin profundizar en demasía en las causas, y se conforma con presentar algunas imágenes de su pasado bien realizadas y que nos introducen paulatinamente en la historia.
La ambientación, banda sonora y fotografía son destacadas, mas el ritmo es lento y en realidad no nos cuenta mucho en los 90 minutos de metraje.
A pesar de que no es lo conmovedora que pretende, está obra es recomendable para los que gustan de ver presentaciones bien hechas, aunque más que entretener su aire pesimista puede dejarlos frustrados.
Género: Drama, romance
Valoración numérica: 8.3
*Disfrute: 7
*Actuación estelar: 10
*Actuación de conjunto: 8
*Dirección: 8
*Argumento: 9
*Originalidad del guión: 7
*Diálogos: 7
*Técnica: 3 décimas extras (fotografía, música y dirección de arte)
Trailer
Colin Firth encarna a George, profesor universitario que pierde el sentido de su vida, tras la trágica muerte de su verdadero amor. Sumado a ese dolor, también tiene que sortear los duros prejuicios de una sociedad americana de los años sesenta que no lo aceptaría si declarara abiertamente su condición homosexual.
El tema del film es la tristeza, derivada de la muerte de un ser querido. El asunto consiste en encontrar la manera de seguir adelante con nuestra vida, sobreponiéndonos a la desilusión que emana de saber que ahora carecemos de algo fundamental que antes sí teníamos. El mensaje estriba en que nunca debemos darnos por vencidos aunque nos hallemos en una situación difícil de superar, porque en la vida siempre está presente la esperanza de encontrar lo que nos falta, o incluso algo mejor.
Con una impecable actuación de Colin Firth (George), esta pelicula nos muestra todas las caras del dolor que sufre un hombre viudo, quien además ya no tiene la motivación ni la energía para ocultarse para no sufrir de discriminación como homosexual; tampoco vislumbra algo que pudiese darle sentido a su vida.
Por su parte, la actuación de Julianne Moore (Charley) es muy buena, pero su personaje como la mejor amiga y examante del protagonista es desaprovechado; mientras que el personaje de Kenny (interpretado por Nicholas Hoult) es convincente y sirve para dar buenos giros argumentales a una trama que es interesante y nos provoca la reflexion, pero que no es totalmente explotada por el guión, ya que éste sólo nos muestra lo fundamental de la situación de George, sin profundizar en demasía en las causas, y se conforma con presentar algunas imágenes de su pasado bien realizadas y que nos introducen paulatinamente en la historia.
La ambientación, banda sonora y fotografía son destacadas, mas el ritmo es lento y en realidad no nos cuenta mucho en los 90 minutos de metraje.
A pesar de que no es lo conmovedora que pretende, está obra es recomendable para los que gustan de ver presentaciones bien hechas, aunque más que entretener su aire pesimista puede dejarlos frustrados.
Género: Drama, romance
Valoración numérica: 8.3
*Disfrute: 7
*Actuación estelar: 10
*Actuación de conjunto: 8
*Dirección: 8
*Argumento: 9
*Originalidad del guión: 7
*Diálogos: 7
*Técnica: 3 décimas extras (fotografía, música y dirección de arte)
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